En este blog analizaremos de manera sencilla pero profunda las tendencias macroeconómicas más relevantes para México en el cierre de 2025, con el objetivo de que tanto personas como empresas puedan anticiparse y tomar mejores decisiones financieras.
Inflación: el fantasma que aún no se va
La inflación ha sido uno de los principales retos económicos en los últimos años. Aunque en 2025 ha mostrado señales de moderación respecto al pico alcanzado tras la pandemia y la crisis energética global, sigue siendo un factor que afecta directamente al bolsillo de los mexicanos.
Tendencia actual
- La inflación general en México ronda entre el 4 y 5% anual.
- Los alimentos y energéticos continúan presionando, aunque con menor intensidad.
- La inflación subyacente (que excluye precios volátiles) muestra resistencia a bajar rápidamente.
¿Qué significa para los consumidores?
- El costo de la canasta básica se mantiene elevado.
- Servicios como transporte, educación y salud registran incrementos constantes.
- Las familias deben destinar una mayor proporción de su ingreso a necesidades básicas, reduciendo el margen para ahorro o consumo extra.
Expectativa hacia fin de año
Se espera que la inflación cierre 2025 por encima del objetivo del Banxico (3%), pero en un rango más controlado que en 2022–2023.
Aun así, el “fantasma” de la inflación sigue ahí: basta un shock externo (aumento del petróleo, conflictos internacionales, fenómenos climáticos) para que se acelere de nuevo.
Tasas de interés: el costo del dinero sigue siendo alto
Para contener la inflación, el Banco de México (Banxico) ha mantenido las tasas de interés en niveles elevados.
Situación actual
- La tasa de referencia se ubica alrededor del 10.75–11%, uno de los niveles más altos en décadas.
- Esto encarece el costo de los créditos personales, hipotecarios y empresariales.
- Al mismo tiempo, ofrece rendimientos atractivos en instrumentos de bajo riesgo como CETES.
Impacto en personas y empresas
- Consumidores: los créditos de tarjeta y préstamos personales son más caros, lo que desalienta el endeudamiento.
- Empresas: las PYMEs enfrentan mayores costos de financiamiento, limitando expansión o inversión.
- Inversionistas: quienes colocan su dinero en bonos gubernamentales encuentran rendimientos superiores a los de años anteriores.
Expectativa hacia fin de año
Banxico podría comenzar a bajar gradualmente las tasas en 2026, siempre y cuando la inflación se mantenga controlada. Sin embargo, para el cierre de 2025 lo más probable es que sigan altas, en un rango de entre 10–11%.
Esto significa que aún no es tiempo de celebrar: el “monstruo” de las tasas caras seguirá acechando hasta el próximo año.
Crecimiento económico: señales mixtas
México ha mostrado cierta resiliencia económica gracias al consumo interno, las exportaciones y la llegada de inversión extranjera por el fenómeno del nearshoring.
Datos clave
- El PIB de México podría cerrar 2025 con un crecimiento cercano al 2.3–2.6%.
- Sectores como manufactura, automotriz y logística han mostrado dinamismo.
- Sin embargo, la construcción y el consumo minorista presentan desaceleración.
Factores positivos
- La relocalización de empresas hacia México (nearshoring) sigue generando expectativas optimistas.
- La fortaleza del peso frente al dólar ha sido un punto a favor para la estabilidad financiera.
Factores negativos
- La inversión pública en infraestructura no ha crecido al ritmo esperado.
- La incertidumbre política por cambios de gobierno y reformas genera cautela en los inversionistas.
- La inseguridad y la falta de energía suficiente en algunas regiones limitan el potencial del nearshoring.
Riesgos internos que podrían espantar la economía
Como en toda historia de Halloween, la economía mexicana también tiene sus riesgos ocultos.
a) Endeudamiento de los hogares
El uso del crédito para consumo en fiestas, Buen Fin y Navidad podría dispararse, lo que en enero traería la famosa “cuesta” y mayor presión en los bolsillos.
b) Presiones fiscales
El gobierno enfrenta un gasto público creciente y un déficit fiscal elevado. Esto podría implicar ajustes en 2026, incluyendo posibles incrementos de impuestos o reducción de programas.
c) Elecciones y transición política
La política siempre influye en la economía. Cambios en políticas públicas o incertidumbre regulatoria pueden frenar la inversión privada.
Riesgos externos: los monstruos fuera de casa
La economía mexicana, al ser abierta, también depende de factores internacionales:
- Estados Unidos: Si la Reserva Federal mantiene tasas altas, Banxico se ve obligado a acompañar para evitar salida de capitales.
- China y cadenas de suministro: Una desaceleración en China afectaría exportaciones mexicanas.
- Conflictos geopolíticos: Cualquier tensión que dispare precios de petróleo o granos impactará en la inflación mexicana.
- Cambio climático: Sequías o huracanes afectan producción agrícola y encarecen alimentos.
Oportunidades en medio de la incertidumbre
No todo son sustos. Así como en las películas de Halloween siempre hay una salida, en la economía mexicana también existen oportunidades:
- Nearshoring: empresas trasladando operaciones desde Asia hacia México pueden generar empleos y crecimiento en el norte y Bajío.
- Tecnología financiera (fintech): México es uno de los líderes en LATAM en startups financieras, con nuevas alternativas de crédito, ahorro e inversión.
- Mercado laboral: el empleo formal ha mostrado recuperación constante, lo que fortalece el consumo interno.
¿Qué significa todo esto para tu bolsillo?
Más allá de los datos macro, lo importante es cómo se traduce en la vida diaria:
- Ahorro: todavía conviene invertir en CETES y otros instrumentos de bajo riesgo para aprovechar las tasas altas.
- Crédito: úsalo con cautela. Evita endeudarte en gastos efímeros y prioriza compras necesarias o estratégicas.
- Consumo: planea tus compras de fin de año; evita que la inflación y las promociones te hagan gastar más de lo que puedes pagar.
- Inversión: diversifica. No pongas todo en dólares ni todo en CETES; busca balance entre seguridad y rendimiento.
Consejos para cerrar el año sin sustos financieros
- Haz un presupuesto festivo: asigna cuánto destinarás a Buen Fin, Navidad y vacaciones.
- Aprovecha el aguinaldo con inteligencia: liquida deudas antes de gastar en regalos.
- Invierte en lo seguro: mientras las tasas sigan altas, CETES y pagarés bancarios son buena opción.
- Mantente informado: la economía puede cambiar de un mes a otro; sigue indicadores como inflación, tipo de cambio y decisiones de Banxico.
- No ignores los riesgos: aunque haya oportunidades, recuerda que 2026 podría traer ajustes fiscales y monetarios.
Conclusión: ¿final feliz o película de terror?
El cierre de 2025 para México combina luces y sombras. Por un lado, la inflación comienza a moderarse, el nearshoring abre oportunidades y el empleo se mantiene firme. Por otro, las tasas siguen altas, el crecimiento es limitado y los riesgos internos y externos podrían cambiar el escenario en semanas.
La clave está en mantener la calma, no dejarse llevar por el pánico y tomar decisiones financieras informadas.
Este octubre, no dejes que los fantasmas económicos te asusten. Planea, compara, ahorra e invierte con estrategia. Solo así tu cartera sobrevivirá no solo al “mes del susto”, sino también a lo que resta del año.




